Vivimos rodeados de Inteligencia Artificial, desde Gmail, que al marcar un mensaje como spam este servidor de correo de Google aprende cuáles son los tipos de mensajes que no queremos recibir en nuestra bandeja de entrada, hasta Siri, el asistente por voz de Apple, que limpia el ruido, intuye los silencios entre palabras y comprende tu idioma para interpretar tus órdenes; pasando por Netflix, que analiza lo que ves para gestionar mejor las sugerencias que te ofrece, y Amazon, que del mismo modo ha impulsado sus ventas de manera extraordinaria gracias a sus algoritmos más refinados con un elevado índice de acierto.