Medios de comunicación digitales como BI-Spain, ObservatorioRH y ITUser han compartido nuestro análisis sobre los ocho motivos por los que se debe integrar la Inteligencia Artificial con la Inteligencia Humana en las organizaciones. El número de empresas que apuesta por la Inteligencia Artificial se ha triplicado en los últimos años. A este respecto, la creciente densidad digital conlleva que las compañías dispongan de una cantidad de datos cada vez mayor y de mejor calidad, lo que permite que las herramientas de IA puedan obtener unos resultados certeros y eficaces. Frente a ello, las personas somos capaces de aprender con un volumen de datos de entrenamiento relativamente reducido y ser más resolutivos ante situaciones de incertidumbre.

En este sentido, el fundador y director general de NovaQuality, Pedro Herrera Nachón, explica que “la IA no solo no es comparable a la humana, sino que la primera puede ser un complemento de la segunda, dando como resultado un nuevo escenario en el que ya no se hablará de Inteligencia Artificial y de Inteligencia Humana, sino de Inteligencia Ampliada”.

¿Cuáles son los beneficios para las organizaciones de integrar las técnicas de IA con los procesos mentales? Detallamos ocho ventajas de trabajar en un entorno basado en Inteligencia Ampliada:

  1. Alto grado de acierto en la resolución de problemas. El Machine Learning funciona con algoritmos de aprendizaje que se entrenan con datos. Así, en un contexto en el que la digitalización propicia que las empresas cuenten con más y mejores datos de entrenamiento muy complejos de procesar para la mente humana, la incorporación de sistemas de IA será sinónimo de una mayor calidad en la resolución de problemas y, en consecuencia, unos resultados más satisfactorios para la compañía.
  2. Óptima velocidad de aprendizaje y respuesta. La capacidad de procesamiento de las maquinas es superior a la del hombre. Por lo tanto, si disponemos de una cantidad relevante de datos, las herramientas de IA aprenderán de una manera más rápida y eficaz, lo que permitirá ofrecer una respuesta más ágil al cliente. 
  3. Facultad para generalizar reglas. En el caso contrario al anterior, ante situaciones en las que contamos con una cantidad de datos escasos, la Inteligencia Humana sí es capaz de aprender y extrapolar correctamente ese conocimiento a otros escenarios.
  4. Elevado nivel de especialización. Una de las ventajas que tiene la aplicación de un sistema de IA en una compañía es que puede enfocar todo su potencial en la resolución de un único problema, mientras que la inteligencia humana tiende hacia un enfoque multipropósito.
  5. Reutilización del conocimiento. Los hombres somos complementarios a la IA en que utilizamos procesos aprendidos en el pasado para solucionar problemas actuales cuando ambos tienen algún punto en común.
  6. Capacidad para asumir más riesgos. En consecuencia de lo anterior, los seres humanos contamos con la facultad de hacer frente a la incertidumbre sin la necesidad de tener una regla con la que funcionar, tal y como sucede en el caso de la Inteligencia Artificial.
  7. Creatividad e imaginación. Esta es una habilidad innata a las personas. Podemos construir algo totalmente nuevo desde cero sin tener referencias previas. Este es un aspecto que complementa el trabajo de la IA, que depende totalmente del proceso de entrenamiento con datos.
  8. Rendimiento uniforme. Una de las capacidades más destacables de las máquinas de aprendizaje es que se mantienen continuamente en un estado inalterable. Son ajenas a cualquier circunstancia, al estado emocional y siempre conservan un rendimiento intacto.