A pesar de que gran parte de la población respondería afirmativamente a esta cuestión, la Inteligencia Artificial no ha llegado a nuestras vidas para quitarnos el trabajo, sino para facilitárnoslo. Acorde a las declaraciones de Guy Michaels, profesor de la London School of Economics, recogidas por el digital El Independiente, “no hay consenso sobre cómo repercutirá la robótica en la creación o destrucción de empleo. Hay estudios que son optimistas y otros que no lo son”. Además, en este mismo blog ya compartimos que uno de los mitos de la IA es que es mucho más que máquinas que se mueven y ejecutan movimientos y acciones humanas. En el futuro el uso de la IA en robots será solo una pequeña parte.

Según un estudio del Instituto de Investigación de Ciencia y Tecnología para la Sociedad de Japón, que ha analizado la situación de hasta 10.000 empleados, ha podido concluir que lo que se va a ver incrementada es la satisfacción de los trabajadores gracias a la tecnología.  Siguiendo con su argumentario, el informe explica que al realizar los robots las labores más tediosas, los humanos podrán dedicarse a otras mucho más motivacionales que aumenten su nivel de satisfacción.

La clave se encuentra en la continua formación. Tal y como recoge El Mundo a través de las declaraciones de Raúl Sánchez, director nacional de Randstad Technologies, “el profesional del futuro va a ser una persona en constante adaptación al proyecto en el que esté desarrollando su función. Por este motivo, la capacidad de aprendizaje va a ser un aspecto fundamental”. Es más, y en palabras de Olivia Fontela, directora de Marketing del portal Infojobs, «cambiará de manera radical la forma de trabajar y hacer negocios, y transformará la vida de los usuarios».

También cabe señalar la cantidad de nuevos empleos que ha generado la implantación de la Inteligencia Artificial, dedicados a entrenar y controlar esos sistemas como son el Data Scientist, Business Translator ML, Data Engineer, Model Integrator o Data-Savvy Lawyer, entre otros. Además, no hay que olvidar áreas relacionadas como la ciberseguridad, la privacidad de los datos, la interacción con los usuarios, la legalidad o la ética.   

Por último, la introducción de la IA en las organizaciones aumentará considerablemente valoración. Así lo demuestra un estudio de Gartner publicado en MuyComputerPro, que asegura que el valor aportado a los negocios por la Inteligencia Artificial superará ligeramente los 3,9 billones de dólares para 2022.